Beber y comer: muy buenos cócteles y rica comida
Doppelganger Bar
Este bar sin tanta prensa en el límite entre San Telmo y La Boca es sin dudas uno de los mejores de la ciudad, sin un ambiente estridente ni un entorno instagrameable, tiene una de las mejores barras de Buenos Aires. Muy buen servicio, déjate llevar por los caminos que ellos te aconsejen. Amplia lista de cócteles, desde clásicos argentinos a históricos europeos; en Doppel se destacan los sabores más bien clásicos con base de whisky o gin. Una cocina bien ejecutada, con una carta de unas diez opciones, lo necesario. Que la comida acompañe de buena forma el protagonismo de las bebidas.
Av. Juan de Garay 500. De martes a sábado desde las 19 horas. @doppelbar
Kamay Lounge
Un muy rico restorán de comida peruana clásica y nikkei -japo-peruano-. Recomiendo su seco, su chipchitori -pollo deshuesado-, sus ceviches, baos y chaufas. Una cocina muy bien trabajada. Ofrecen un menú de mediodía a precio más que económico y con buenas opciones. Además de los clásicos piscos sour, tienen una amplia carta de tragos, todos basados en la bebida nacional peruana. Mayoría de ellos, frutados y aromáticos, de notas tropicales. Una gran opción para una buena bebida con rica comida, más allá de los clásicos y a un precio amigable.
Marcelo Torcuato de Alvear 975. De lunes a sábado mediodía y noche. @kamaylounge
Tres monos
Tres monos es uno de los bares más premiados y renombrados de Buenos Aires y no es casualidad. De espíritu moderno y disruptivo, se alejan absolutamente de los clásicos y ofrecen una carta de unos diez tragos, todos ellos originales, únicos, curiosos y provocativos; pero siempre: muy bien ejecutados. Si querés probar cosas originales, alejarte de los gustos adquiridos, andá. Su carta de comidas también es escueta pero acompaña bien la propuesta de bebidas: media docena de cosas para picar y ricos sándwiches clásicos para seguir.
Guatemala 4899. Todos los días desde las 14 horas. @3monosbar
Sede
Sede, central de whisky, es un bar en el epicentro del pujante barrio de Chacarita que, como su nombre lo indica, todo su espíritu esta enfocado a esta noble bebida destilada de granos. Tiene una oferta de casi una centena de whiskies y además, y sobre todo, ofrece muy ricos cócteles clásicos y modernos -todos con base en el whisky- en un espacio cálido que a las noches del fin de semana suele estar atestado. De comer, una media docena de ricos platitos para poner en el medio de la mesa, mayoría de ellos vegetarianos, originales y bien hechos.
Guevara 421. De martes a sábados a partir de las 19:30. @sedewhisky
Verne Club
Una de las mejores barras de la ciudad en un muy buen ambiente, con una amplia carta de tragos de creación propia -que va evolucionando y cambiando con las estaciones- donde se destacan sabores más bien clásicos pero originales. Muy rica y amplia variedad de martinis; coctelería elegante y justa. También hacen, a pedido, los cócteles de toda la vida. Tienen un lindo patio interior, un espacio de sillones o mesas. Para acompañar, muy ricos panchos y buenos platitos como sus tacos de carne de vaca o su selección de quesos y fiambres.
Av. Medrano 1475. Todos los días desde las 19 horas. @verneclub
Los Galgos, 1º piso
Si la planta baja de este bar notable que fue reciclado y puesto en valor hace unos pocos años es el lugar de un buen café-restorán, su primer piso casi oculto es el espacio donde se enaltece y respeta la historia de la coctelería más nuestra. Recrean los clásicos históricos con nombre y apellido de la coctelería argentina del siglo XX, una idea genial y única. Además, los ofrecen acompañados de una cocina bien porteña muy cuidada y bien ejecutada. Cada tarde, hay hora feliz de vermú.
Av. Callao 501. De lunes a sábado. @losgalgosbar
Gran Bar Danzón
El equilibrio perfecto entre una muy buena barra y una muy buena cocina, algo muy difícil de encontrar. Con más de 25 años, es uno de los precursores de la alta coctelería porteña y los bares de vinos. En su mítica barra de luces ofrecen una veintena de ricos cócteles de autor de corte más bien clásico. Es recomendable preguntar y dejarse llevar. Siempre acompañados de una cocina muy bien trabajada y elegante, destacan su tartatin de manzanas y queso de cabra, su confit de pato o sus spring roll, entre otros. También ofrecen buen sushi y unos postres sumamente recomendables.
Libertad 1161, 1º piso. Todos los días por la noche. @granbardanzon
Yiyo el Zeneize
Fundado en 1921 bajo el nombre “La Campana Piamontesa”, este mítico almacén y bar del barrio de Parque Avellaneda se refundó en la pandemia luego de la muerte de su viejo dueño, la familia decidió tomar su legado y darle nuevos bríos. Así nace el actual restorán, bar y almacén donde ofrecen muy ricos encurtidos, buenos fiambres, muy buenos clásicos porteños como tortillas, empanadas, vitel toné, milanesa, pastel de papas y demás históricos enmarcado en una gran ambientación de una Argentina que ya no existe. Para estar a tono, tienen una larga lista de vermús y cócteles con los aperitivos y amargos más argentinos. O por qué no, unas jarritas de vino patero con algunas magias.
Av. Eva Perón 4402. De miércoles a domingo mediodía y noche. @yiyoelzeneize.ba
878 Bar
Con casi 20 años, el “ocho” es uno de los bares icónicos de la ciudad por ofrecer una muy buena y porteña coctelería. Por un lado, los cócteles inspirados en Buenos Aires y su idiosincrasia, por otro, una decena de cócteles históricos de la casa de tintes más clásicos. Muchos de los destilados que usan son hechos especialmente para el lugar. Para comer, buena variedad de platitos para el centro de la mesa, su famosa hamburguesa de cordero y un original y muy rico gramajo.
Thames 878. De martes a domingo por la noche. @878bar